La octava meditación del libro "Preparación para la muerte o consideraciones sobre la verdades eternas" de San Alfonso María de Ligorio, es la "muerte del justo", en la cual nos habla que para el justo que ha pasado su vida amando a Dios, la muerte, no es ningún tormento, ni tampoco le teme, como si ocurre en caso del pecador. Añade que para el justo, la muerte es el paso a la vida, el tiempo para alabar, gozar y descansar con Dios por toda la eternidad, y el fin de la tribulaciones, penas y tentaciones
"En la hora de la muerte enjugará el Señor de los ojos de sus servidores las lágrimas, que hayan derramado en esta vida en medio de las penas, de los temores, de los peligros y de los combates que hayan sostenido contra el infierno. Lo que más consolará a un alma fiel, cuando se le anuncie la proximidad de la muerte, será el pensar que pronto va a quedar libre de todos los peligros que la exponen a ofender a Dios, de tantas congojas de conciencia, de tantas tentaciones como le suscitaba el demonio: la vida presente es una guerra eterna con el infierno, durante la cual corremos riesgo de perder a Dios y a nuestra alma". (San Alfonso María de Ligorio, Preparación para la muerte.)
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Fuente Video: Efraín Hurtado / Imagen: joelespinoza.blogspot.com/.
